Cocentaina celebró ayer la festividad de la Mare de Déu del Miracle. Una multitud arropó a la patrona de esta localidad en los actos del traslado, la ofrenda de flores, la solemne eucaristía y la procesión.
El volteo de campanas y la Diana por las calles del municipio marcaron el inicio de esta jornada que tuvo su momento más emotivo cuando bajaron el icono de la Mare de Déu desde su altar en el monasterio para colocarlo en el trono-andas, entre aplausos y vítores de «Mareta, Mareta».
Los maseros, minutos después de las diez de la mañana, sacaron la imagen a la plaza del Pla en el momento en que soltaron las palomas y sonó el «Benvinguda reina del cel». Tras esta bienvenida, los contestanos, muchos de ellos vestidos con el traje tradicional y llevando los ramos de flores, fueron formando dos filas para desfilar por varias calles hasta llegar a la iglesia de Santa María.
En la comitiva tampoco faltaron los niños que representan a los condes y mosén, los homenajeados, la suplicante, mayordomos, camareras, la junta directiva de la Pía Unión y los sacerdotes encabezados por el obispo contestano Juan Antonio Reig Pla.
Como es tradición, los portadores giraron la imagen de la Mareta al pasar por delante de la capilla de San Antonio Abad, que está en el Palau Comtal, ya que allí fue el lugar donde aconteció el milagro de las lágrimas.
Entre aplausos y vítores de «Mareta, Mareta» llegó la imagen de la patrona de Cocentaina hasta la escalinata de la parroquia de Santa María. Allí, Miriam Ferrándiz Castelló recitó la súplica a la Mare de Déu. La joven contestana, tras protagonizar este momento tan especial, explicó el hecho de mirar a la patrona y dedicarle los versos «ha sido más emocionante de lo que me esperaba».
Los contestanos, una vez estuvo la imagen de la patrona en el interior del templo, depositaron los ramos de flores en el altar y, a continuación, se inició la solemne eucaristía. Después se celebró el homenaje a las Hermanas Trinitarias. Ya por la tarde, tuvo lugar la procesión por las principales calles de la capital del Comtat.
Las fiestas en honor a la Virgen del Milagro seguirán hoy con el triduo y mañana habrá ofrenda de flores infantil y fireta. Por la tarde, tras la eucaristía, se devolverá el icono de la Mare de Déu al monasterio.

M.Vicedo www.diarioinformacion.com