La Conselleria de Infraestructuras y Medio Ambiente se ha comprometido a impedir la instalación de aerogeneradores en la sierra de Alfaro. La Generalitat se basa en la declaración de la sierra como Lugar de Interés Comunitario (LIC), una figura de protección europea que, pese a ser menos restrictiva que la Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA), obliga a cualquier proyecto a superar un estudio de impacto. “No se hará nada si, como creemos, los estudios ornitológicos señalan la importancia de la zona”, afirmó el martes en la comisión de Medio Ambiente de las Cortes Valencianas el secretario autonómico, Victoriano Sánchez.

El Tribunal Superior de Justicia anuló la declaración de la sierra de Alfaro como ZEPA en 2013 porque la Conselleria de Medio Ambiente no informó a la empresa adjudicataria del plan eólico, una filial de ACS, de la ampliación de la zona protegida y porque aquella ampliación no se basó en estudios técnicos, sino en una simple alegación de la Coordinadora d’Estudis Eòlics.

Sánchez ha asegurado en las Cortes que la conselleria no recurrió  porque los servicios jurídicos auguraban pocas posibilidades de revocar la sentencia. “Incluso nos hubiese tocado pagar las costas judiciales”, afirmó el secretario autonómico, quien lamentó el error de la conselleria que dio pie al recurso de la empresa.

El secretario autonómico ha anunciado, además, que la conselleria va a estudiar la fórmula para que la sierra de Alfaro vuelva a ser ZEPA. “Tenemos interés en que vuelva a ser ZEPA y analizaremos lo que tenemos que hacer y como lo tenemos que organizar para que la zona vuelva a estar totalmente protegida”, afirmó.