Hubo quién pensó que el ingeniero/empresario Iñaki Berenguer, de Muro, se retiraría después de vender su primera idea, Pixable, una empresa que diseñó una aplicación con un álbum de fotos para móviles y redes sociales, al gigante asiático de telecomunicaciones Singtel por 26,5 millones de dólares, en una operación que dio la vuelta al mundo. Nada más lejos de la realidad: dos años y pocos meses después, ha protagonizado la segunda; en este caso, la empresa se llama Contactive y el producto principal Klink, una guía telefónica mundial para móviles con 600 millones de números identificados.
Esta vez, sin embargo, el montante de la operación no ha sido divulgado, por cuestiones de confidencialidad y también de próxima salida a bolsa. «Nos pagan una buena parte en acciones y no sabremos el valor que pueden tener hasta que no coticen en bolsa, lo cual puede tardar un poco», explicó ayer tarde Iñaki Berenguer a este diario desde las nuevas instalaciones en Wall Street, a las que se trasladaron la semana pasada.
Lo que sí está claro es que Contactive se ha unido a ThinkingPhones, una empresa norteamericana líder en el mercado de las comunicaciones americanas, especialmente en la fabricación y comercialización de centralitas.
Cuando culminó el proceso de Singtel, Iñaki continuó con el grupo asiático, pero este ingeniero formado en Cambrigde y en el MIT, siempre tiene ideas rondado por la cabeza. «Me molestaba mucho que cuando descolgaba el teléfono, la mayor parte de las veces no sabía quién llamaba; a veces dejabas activarse el buzón de voz y luego resultaba que era un amigo. O lo cogías y era telemarketing de alguna telefónica. Siempre podías recurrir a Google y buscar el número, pero pensé que es un servicio que se podía dar», explicó.
Así nació Contactive, una empresa creada con el apoyo accionarial mayoritario de la propia Singtel, pero independiente. El producto se denominó Klink y en el tiempo transcurrido ha llegado a contar con 1,3 millones de usuarios y una oferta de 600 millones de números de teléfono identificados por todo el mundo.
El éxito de la iniciativa empresarial, planteada para las empresas, pero también con una versión más modesta gratuita para consumidores particulares, empezó a llamar la atención y ha acabado provocando la fusión con ThinkingPhones, una destacada firma norteamericana de telecomunicaciones. «Está especializada en la fabricación de centralitas telefónicas y por eso le viene muy bien nuestra aplicación», indicó Berenguer.
El acuerdo ha permitido la integración de la veintena de trabajadores que forman Contactive, en tanto el propio Berenguer pasa a ser vicepresidente del producto. «ThinkingPhones quiere salir a bolsa en el plazo aproximado de un año y voy a colaborar en este proceso, algo que me ilusiona porque es una experiencia que no he vivido hasta el momento», indicó.
La compañía tiene cerca de 300 trabajadores y sedes en Canadá, Boston y Amsterdam, a la que se suma la de Nueva York -concretamente, en Wall Street- que aporta la propia Contactive y a la que se trasladaron el pasado día 30, en vísperas de culminarse la operación difundida ayer.
De esta forma, la segunda etapa de la trayectoria empresarial de Iñaki Berenguer ha culminado con la incorporación a otro gran grupo empresarial, en este caso más modesto que el del gigante asiático Singtel.
De momento, la carrera profesional seguirá en este contexto, pero no es descartable que más adelante, Berenguer pueda seguir teniendo ideas que acaben cuajando en nuevas experiencias profesionales. A sus 38 años, aún tiene mucho tiempo para generar proyectos.
M.Candela www.diarioinformacion.com
