Un taller de empleo promovido por el Ayuntamiento de Agres está ejecutando dos cortafuegos con el objetivo de proteger tanto el casco urbano del municipio como la Sierra de Mariola. La iniciativa se ha adoptado como consecuencia de la falta de mantenimiento del parque natural, lo que ha propiciado que se acumule una gran cantidad de vegetación en un momento además de especial riesgo por la prolongada sequía. Son diez los parados que están recibiendo formación y un salario, al mismo tiempo que llevan a cabo los trabajos en el monte.

Agres se encuentra situado en plena umbría del parque natural de la Sierra de Mariola, rodeado de un frondoso bosque que si bien supone un atractivo a nivel medioambiental y paisajístico, también conlleva un evidente riesgo en caso de incendio forestal. Tal y como ya informó este diario, el alcalde, José Manuel Francés, denunciaba semanas atrás que las inversiones en mantenimiento han sido mínimas en la zona a lo largo de los últimos años, lo que ha propiciado que se acumule una gran cantidad de vegetación e incluso troncos y ramas secas de árboles derribados por la nieve, en una época además de extrema sequía.

Esa situación ha llegado a provocar alarma social entre los vecinos del municipio, «ante el temor de que un hipotético incendio pudiese llevarse por delante medio pueblo», resaltaba Francés.

Así las cosas, un taller de empleo presupuestado en 96.000 euros, subvencionados por la Generalitat, se está dedicando a realizar trabajos preventivos. En concreto, diez parados están recibiendo formación y un salario, al tiempo que practican una franja auxiliar en la pista que conduce desde el Refugio Zamorano a la Cava Don Miguel. También está previsto ejecutar otra acción similar en la solana, junto a la Foieta dels Carros.

M.Vilaplana  www.diarioinformacion.com